martes, 21 de agosto de 2012
Veo mucho potencial, pero está desperdiciado. Toda una generación trabajando en gasolineras, sirviendo mesas, o siendo esclavos oficinistas.La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos, no hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seríamos millonarios, dioses del cine, o estrellas del rock. Pero no lo seremos, y poco a poco lo entendemos, lo que hace que estemos muy cabreados
El mundo no es todo alegría y color... Es un lugar terrible, y por muy duro que seas es capaz de arrodillarte a golpes y tenerte sometido permanentemente si no se lo impides. Ni tú, ni yo, ni nadie golpea más fuerte que la vida. Pero no importa lo fuerte que golpeas, sino lo fuerte que pueden golpearte. Y lo aguantas mientras avanzas, hay que soportar sin dejar de avanzar. ASI ES COMO SE GANA!. Si tú sabes lo que vales, ve y consigue lo que mereces. Pero tendrás que aguantar los golpes
Imagínense por un segundo que cargan una mochila. Quiero que sientan los lazos en sus hombros. ¿Los sienten? Quiero que lo llenen con todas las cosas que tienen en su vida, hasta las más pequeñas. Collares, relojes electrónicos. Sientan el peso que eso añade. Añadan otras cosas, ropa, electrodomésticos, lámparas, televisores, refrigeradores. Esa mochila se hace pesada, pero sigue creciendo. Su sofá, la cama, la TV por cable. Todo eso. Metan su auto, su casa, ya sea con estudio o sólo un departamento de dos ambientes. Quiero que metan todo eso en la mochila. Ahora traten de caminar. Es difícil, ¿cierto? Eso es lo que hacemos diariamente. Nos cargamos de tanto peso hasta que no nos podemos mover. Y no se equivoquen: moverse es vivir
Es el momento de escribirte lo que nunca fui capaz de decirte, aunque sea tarde, escribir lo que ha sucedido en una carta que no te voy a mandar. Que no vas a recibir nunca. Que como tu me enseñaste, cuando acabe de escribirla la quemaré, los sentimientos se pondrán a arder, y ese dolor, cómo era... Ah sí, ese dolor no se te queda tan dentro. Esta vez solo quiero ser claro, sería un imbécil si no gritara que me he equivocado, desde el principio, contigo. He intentado avanzar sin apartar antes las cosas que lo impedían, agarrado al pasado, mirando para atrás, queriendo olvidar pero sin parar de recordar, empeñado en quedarme ahí. Qué locura no? En medio de hn lado y del otro, sin perdonar, sin perdonarme, sin avanzar. Dónde está el secreto del futuro? Puede que esté en fijarse bien, en avanzar, mirar más cerca. Más. Tan cerca que lo borroso se vuelve nítido, se vuelve claro. Solo hay que dejar que las cosas pasen. Y ahora lo tendría claro. Aunque ya no depende de mí
Have you ever been in love? Horrible isn’t it? It makes you so vulnerable. It opens your chest and it opens up your heart and it means that someone can get inside you and mess you up. You build up all these defenses, you build up a whole suit of armor, so that nothing can hurt you, then one stupid person, no different from any other stupid person, wanders into your stupid life…You give them a piece of you. They didn’t ask for it. They did something dumb one day, like kiss you or smile at you, and then your life isn’t your own anymore. Love takes hostages. It gets inside you. It eats you out and leaves you crying in the darkness, so simple a phrase like ‘maybe we should be just friends’ turns into a glass splinter working its way into your heart. It hurts. Not just in the imagination. Not just in the mind. It’s a soul-hurt, a real gets-inside-you-and-rips-you-apart pain. I hate love.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)